Canto a los espíritus milongueros

Poema lunfardo

"Yo no sé que me han hecho tus ojos..." (vals)

Poseídos
Bailando cada tarde
los espíritus tangueros en la pista
Con los ojos cerrados los artistas
de la milonga
llegan desde la calle...
Cabecean alrededor
Presienten
que los duendes
en el aire se pasean
y el corazón al Sur les parpadea
en taquicardia feliz
A veces mienten
y se seducen el cuerpo y los sentidos
como jazmines de diciembre
Parecen
sombras y luces
Son flores que les crecen
en las manos-la piel-en el destino...

Están posesos
Suenan los bandoneones
y se cruzan
plegarias milongueras
Ceremonias antiguas
Las primeras
formas eternas de alimentar pasiones...

Espíritus que sueñan sin permiso
sus sueños inviolables
Fugitivos
En la milonga
mareados/poseídos
los bailarines de la desmesura
que pierden por el suelo la cordura
latiendo al borde
de un corazón cautivo
Fantasmas poseídos que en el aire
supieron ver
al trasluz todas las cosas
y junto a su verdad
sembraron rosas
Copas de desazón
Melancolías
y esa música azul tan bienvenida
y el alma a contramano del suicidio...

Tango feroz
Espíritu en delirio
Los bienhechores vientos del milagro
se abren en dos el pecho:
hay sólo tangos
en medio del amor y del peligro
Espíritus salvados
Redimidos
entre el rumor de ayer/el humo/el baile
Espíritus andantes por el aire
en su sueño inviolable y protegido

Son deseos salvados del olvido
por un tanguero gris
-como sus canas-
que atesora cierto entusiasmo/ganas
sus "naranjos en flor"
y su optimismo...
Siguen bailando
Bailan consigo mismo
bordando crucesitas y entreveros
Guardan su soledad entre los dedos
y la luna les brilla tras los ojos

Rojos y negros
Colores del antojo
Espíritus de luz/Atropellados
Milongueros presentes y premiados
arrimados al Sur de sus fervores
Tango feroz
Sombra de bandoneones
Espíritus deseantes y marcados
En estos tiempos tristes
-recortados-
guardan bailando
su buena rebeldía

Que "el siglo XXI no será una porquería"
Será mejor:
¡Lo juro por el Tango!