No quisiste mentir

Yo no puedo quererte dijiste
y un perdón suplicaste por Dios
te mire muy profundo a los ojos
y vi en ellos un lagrimón.
Mi pequeña pensé nada temas
yo comprendo la vida es así
y poniendo en tu tibia mejilla
el beso más sano te dejé partir.

Mis ojos estaban cargados de luna
y los tuyos de sol mañanero
como pude asomarme a tus horas
aún sos primavera y yo ya era invierno.
Si supieras como te recuerdo
aún digo tu nombre y me siento feliz
pues comprendí el favor que le hiciste a mi suerte
no podías quererme no quisiste mentir.

No podré ya olvidarte en el tiempo
siempre, siempre en mi mente estarás
un mechón jugueteando en tu frente
y muy triste tu hondo mirar.
Te veré siempre igual a esa noche
la más cruenta de cuantas viví
cuando ansioso de morder tus labios
con un beso sano te deje partir.