No llores más [b]

Vals

Música: Antonio Polito

Madrecita que llena de angustia,
de rodillas ante un crucifijo,
lloras tanto por causa del hijo
que una mala mujer engañó.
Te quitaron la flor de tus días,
te quitaron el sol de tu cielo
y hoy si acaso te queda un consuelo
es aquel de que mucho te amó.

Pobre madre, oh, dulce viejecita,
de pena te consumes;
por Dios no llores más.
Que si tanto pediste por su alma,
tu hijo ya reposa en una eterna paz.
Y a la ingrata mujer que lo ha perdido,
que fue la que llenara de sombra su vivir.
Ni siquiera tu odio le consagres,
que aquellos que son malos también tienen su fin.

Todos gimen por algo en e1 mundo.
¿Quién su gota de hiel no ha bebido?
Tú lamentas al hijo querido,
que es por cierto tu pena mayor.
Ten coraje y enjuga tus ojos,
que si a veces en calma soñamos
lo mejor de la vida pasamos
sin un poco de luz ni calor.