Por
Luis Alposta

Acerca de los zafados Bailes del Internado en París

a historia de estos bailes comienza a gestarse el 13 de septiembre de 1802, cuando Napoleón crea el Internado en los hospitales de París.

Recién en cuarto año los estudiantes de medicina franceses (entonces no aceptaban estudiantes mujeres) pasaban a ser internos, después de aprobar un examen escrito y posteriormente otro oral, que rendían anualmente durante el verano. Una vez dado el escrito, y antes de presentarse al examen oral, era cuando realizaban Le Bal de L'Internat.

Estos fueron festejados en el Bal Bullier durante todo un siglo y era tradicional que cada hospital organizara su desfile, incluyendo zafadas representaciones, en las que lo sexual subyacente a la fiesta, al placer y a lo permisible o lo prohibido, se ve claramente en los afiches y en las invitaciones cursadas.

La vida en el Internado giraba en torno a la formación de los internos y a la práctica de actividades lúdicas, constituyendo el Baile del Internado la principal. Cada año, los propios estudiantes de medicina o sus amigos artistas, confeccionaban dos tipos de invitaciones: para mujeres y para hombres, con textos y contenidos icónicos diferentes. Si nos detenemos a observarlas veremos hasta qué punto las mujeres eran consideradas como objetos sexuales.



Colaboraban en los preparativos los mismos estudiantes, donde, en forma muy especial, prestaban su ayuda «las amigas», quienes no vacilaban en poner también el «hombro» a los requerimientos del festejo, en el que fiesta y champán siempre estaban presentes.