Aura que no ve la vieja!

Poema lunfardo

Tangotexte: Silverio Manco

- Vení, china, yo te adoro
no esperés más, Catalina,
tu grata sonrisa imploro.
- Ya lo adivino, Sardina.
Desde que vos has venido
es tal el amor que siento...
- Si yo siempre te he querido...
- Abarajá un momento,
que a veces cuando solita
en la máquina cosiendo
por vos mi alma palpita
y lágrimas voy vertiendo...
- Te comprendo, china mía,
y hasta quisiera llorar.
Es tanta la cruel falsía
que hasta me hace renegar.
- Dudar de mi no podés.
- Pero ¿qué querés que dude?
- Digo esto por si temes
de mí que yo te sacude.
- No, china, si lo que tengo
no es duda, para que veas
los viejos cuando yo vengo
me ponen las caras feas.
- No le hagas caso, Sardina,
con tal que tengas mi amor.
- ¡Así me gusta una china!
- No hay que aflojarle al dolor,
un remedio hay que buscar.
- Si la vieja nos madruga
y llega el tiempo'e manyar...
- Pronto emprendemos la fuga,
espiantamos y ya está.
Ancú, mi mama se aleja.
- Güeno, pichona, espiantá
¡aura que no ve la vieja¡
Y así terminó, señores,
el sufrir de Catalina,
después de largos amores
con el pardito Sardina.


Other lyrics by Silverio Manco

Aura que no ve la vieja!