Por
Salvador Otero

ació en el barrio de Flores. Su familia estaba constituida por su padre Manuel, su madre Dolores Moreno, ambos españoles y su hermano Manuel, que luego alcanzaría renombre como cultor de la música ciudadana.

Realizó sus estudios primarios en la escuela Juan Bautista Peña, de la calle Trelles 948, la misma en donde el escritor Leopoldo Marechal ejerció como maestro y cuyo salón de música fue bautizado con el nombre de Carlos Gardel por disposición municipal.

El apogeo del tango y la consolidación de la radio fueron las causas de la inclinación musical de muchos jóvenes y Osvaldo fue uno de ellos. En agosto de 1931, adoptó definitivamente el apellido materno y se integró como chansonier a la orquesta de su hermano Manuel, para cantar en Radio Prieto en los programas auspiciados por la bodega Giol. Completaban dicho ciclo, Charlo, Amanda Ledesma y Virginia Vera. Fue el comienzo de una serie de presentaciones radiales, que continuaron en Radio Porteña, La Voz del Aire, Radio Argentina y, nuevamente, en Radio Prieto.

En 1932, la orquesta actuó en muchos espectáculos presentando al dúo de cantores conformado por Moreno y Félix Gutiérrez. En diciembre, actuaron en el cine Villa Crespo, de la calle Triunvirato 835, durante todas las noches y previamente a la exhibición del film La mujer de los cabellos rojos, con Jean Harlow.

Con la orquesta de su hermano grabó ocho temas, entre ellos esa bella pintura de Celedonio Flores, con música de Manuel BuzónMediodía”.

Al año siguiente, probó fortuna como solista por varias emisoras, contando con los buenos oficios del cantor Alberto Vila, quien le cede el repertorio y los guitarristas para el debut en Radio Prieto.

A principios de 1935 actuó con la orquesta Buzón en la sala del cine Monumental, para la elección de Miss Radio, también se presentó en Radio Rivadavia y luego en Splendid. En este período se destacan sus interpretaciones del vals “Noches de Atenas” y del tango “Papel picado”, acompañado por los guitarristas Ramos, De Ruddy y Buscaglia y, en algunas ocasiones, por el dúo Canattaro y Pedretti.

En mayo de 1936, obtuvo especial resonancia con el tango de Guillermo BarbieriFlor del valle”, también con “Es una santa mamá” de Miguel Caló y “No vale la pena” de Antonio Helú. En junio, Moreno que no había dejado su actividad de mecánico dental, participó en la fiesta homenaje al cantor Pedro Vargas, con quien sostuvo una singular payada sustentada en la natural disposición para la improvisación de la que hacía gala el mexicano.

En enero de 1937, finalizada su labor en Radio Splendid vuelve a cantar en Rivadavia canciones populares, ya sean tangos, zambas, estilos o cifras. Un año después, actuó en el festival realizado en el Luna Park, con el fin de recaudar fondos para repatriar los restos de las víctimas del accidente de Medellín: Barbieri, Riverol y Carpas Moreno, acompañantes de Gardel.

En octubre de 1938 participó, sólo como actor, en un corto papel en la película El viejo doctor, dirigida por Mario Soffici, donde Enrique Muiño, Alicia Vignoli y Ángel Magaña tenían los roles protagónicos.

En esos años transitó por diversas emisoras hasta que, en 1939, regresó a Belgrano en un programa en el que también estaba la orquesta de Rodolfo Biagi con su cantor Teófilo Ibáñez. En esa radio estaban muchos de los artistas más importantes del momento y él estaba en la nómina. En el mes de enero fue invitado a participar en el film El sobretodo de Céspedes, dirigida por Leopoldo Torres Ríos, donde cantó la milonga “Quién te dice” de Rodolfo Sciammarella, acompañado por la orquesta de José Tinelli.

Fueron muchos los programas exitosos de Belgrano, entre otros, el auspiciado por Jabón Federal en el que Moreno realizó encuentros payadoriles con Néstor Feria y, donde también se presentaban el cuarteto de Roberto Firpo, Sofía Bozán y Tito Lusiardo. Fue uno de los enmascarados en la Audición Misteriosa, junto a Nelly Omar, Fanny Loy, Carlos Viván, Tania y otros. Los radioescuchas tenían que reconocer las voces de los artistas.

En el principio de los años ’40, logró mucha repercusión con sus interpretaciones de: “Milongueando”, milonga de Pracánico y Carlos Pesce y los tangos “Suerte loca” y “Corazón”.

Una vez, cuando estaba cantando “Agüelita que horas son”, la locutora Tita Armengol, quien había grabado la hora para el servicio telefónico, lo interrumpió en medio del tema y dijo: «Las nueve y cuarto», lo que provocó risas generales y la mirada atónita de los directivos de la radio.

En 1941, fue contratado por Radio Argentina para su programación anual, en la que participaron: Azucena Maizani, Ada Falcón, Oscar Alonso, Carlos Roldán, Juanita Larrauri, Héctor Palacios, entre otros artistas. También es presentado en Radio Belgrano, como integrante de su embajada artística, entre los que recuerdo a Santiago Devin, Roberto Firpo, Dorita Davis, Roberto Zerrillo, Maruja Pacheco Huergo, Alberto Gómez, Francisco Lomuto y Juan de Dios Filiberto.

En julio de ese año, filmó con un papel destacado Gran pensión La Alegría, realizada por Julio Irigoyen y luego, actuó en el teatro de revistas junto a Luis Sandrini, Azucena Maizani y Tita Merello, en la obra Una novela de sorpresas y, al final del año, en la representación de Los muertos, de Florencio Sánchez.

Cuando el guitarrero y letrista Lito Bayardo arribó a Buenos Aires desde su Rosario natal, se vinculó con Moreno y formaron un dúo que debutó en septiembre de 1943, en Radio Belgrano. Su mayor éxito era “Allá en el bajo”. A mediados del año siguiente se separaron y Moreno se reintegró a Splendid compartiendo el programa con Mario Maurano y su orquesta.

Fue sin duda, un cantor de la radio, por ello resulta imposible nombrar todas sus presentaciones hechas durante aquellos años, generalmente con guitarras, pero podemos mencionar algunos éxitos: el estilo “Guitarra guitarra mía”, los tangos “Encuentro”, “Si se salva el pibe” y la milonga “Música del organito”, que le pertenece en colaboración con su hermano.

En agosto de 1955, a raíz de la muerte de Manuel Buzón, asume la representación de la orquesta, con la dirección de Lalo Benítez y con el cantor Marcelo Paz.

Luego de varios años sin actuar ante los micrófonos, en 1961 reaparece en Radio Del Pueblo y en Belgrano.

Murió en Buenos Aires, a los 76 años, rodeado del afecto de todos los que lo conocieron y admiraron.