Viviana Vigil

Nombre real: Vigil, Viviana
Cancionista
(20 diciembre 1959 - 16 mayo 2017)
Lugar de nacimiento:
San Antonio de Areco (Buenos Aires) Argentina
Por
Federico García Blaya

omienza su carrera siendo aún una niña, en San Antonio de Areco, su ciudad natal. En sus inicios interpretó folclore; en 1975 ganó el concurso de «Argentinísima» y grabó su primer disco simple.

En 1981 obtuvo el premio Consagración en el Festival Nacional de Folklore de Cosquín (Córdoba) y editó un disco para el sello Microfón con zambas, huellas, valses, incluyendo el tango “Cantando” y la milonga “De Buenos Aires morena”. Este disco fue reeditado con el título No llores por mí Argentina, con el agregado del tema homónimo y la milonga “Adónde se irán mis penas”.

La grabación de “No llores por mí Argentina” fue un éxito, siendo uno de los temas más difundidos en la época, lo que le valió realizar una gira que comenzó por Córdoba, Mendoza, Tucumán, recorriendo el resto del norte y luego todo el país. En 1989 resultó ganadora del XII Festival Nacional e Internacional de Intérpretes de la Canción de Buga (Colombia), interpretando ese tema.

De a poco fue inclinándose por el tango e ingresó en la orquesta de Mariano Mores. Con esa agrupación participa de la gira que, en 1984, hicieron a Japón. Esa experiencia fue fundamental para afianzarse como cancionista del género, foguearse, aprender junto a un director de enorme trayectoria y la recepción de un público entendido y exigente. Sobre eso, declaró: «No es un mito lo de la pasión de los japoneses por el tango. Inclusive, me preguntaban por compositores e intérpretes que a veces ni los argentinos conocen o recuerdan». Permaneció casi 9 años junto al creador de “Uno”.

Sobre Mores supo decir: «Con Mores hay que cantar o cantar. Es un desafío estar a su lado. Nunca estuve junto a un músico que supiera tan exactamente lo que quiere de un cantante como él. Es la perfección: realmente, es uno de los pocos maestros».

Durante siete años (2000-2007) participó de Ballet Argentino, la compañía del bailarín Julio Bocca, participando del espectáculo Bocca Tango. Con dicha compañía recorrió el país, América y Europa, siendo compañera de varios otros artistas tangueros como: Guillermo Fernández, Pablo Mainetti, Pablo Agri, Hernán Possetti, bajo la dirección musical de Julián Vat. Como cierre de esta etapa, participó de la actuación de despedida de Julio Bocca, en un espectáculo gratuito ante una multitud en las inmediaciones del Obelisco de la ciudad de Buenos Aires.

En sus retornos al país no deja de actuar en Buenos Aires, escenarios tangueros de San Telmo, programas musicales de televisión y allí donde se la convocara. También participa de presentaciones con orquestas como las de Orlando Trípodi, Color Tango y fue integrante de la compañía Forever Tango, de Luis Bravo, con la cual hizo varias giras.

El sello Melopea editó, en 1999, Tango, su disco solista en el que se dedica íntegramente al género. En él participaron, Mariano Mores, Antonio Agri, Walter Ríos, Horacio Ferrer, Nicolás Ledesma y Lito Vitale. «Ninguno quiso percibir un solo centavo por hacerlo. Y eso, sobre todo en esta época, gratifica mucho», decía. El grupo que la acompañó estaba integrado por Oscar Laiguera (piano, arreglos y dirección), Ramón Maschio (guitarra), Osvaldo Montes (bandoneón), Claudina Pugliese (contrabajo eléctrico).

En ese disco estrenó un tango inédito de Astor Piazzolla y Horacio Ferrer, “Poema en sí mayor”, que tiene una historia particular que ella relata de esta manera: «Piazzolla compuso ese tango en febrero de 1981, en París, y a mí me llegó un poco de casualidad. El chelista José Bragato, después de la muerte de Piazzolla, me regaló unas partituras, y yo encontré dentro de ellas el poema original de Ferrer que él había escrito para ese tango y que luego nunca interpretó nadie. Le pedí autorización para hacerlo y me dijo que sí, naturalmente, pero volvió a escribir íntegramente la letra».

En 2004 se editó el disco del espectáculo Bocca Tango en el que ella interpreta varios temas, asimismo lanzó su disco solista Encontrarnos, acompañada por el guitarrista Juanjo Domínguez. Este disco fue nominado a los Premios Gardel 2005 en el rubro Mejor Álbum Artista Femenina de Tango, aunque, fiel a su estilo, también aborda temas de otros géneros.

En 2005 presentó el espectáculo Nuevas ilusiones, en el que expresa ese repertorio amplio que siempre le interesó, en el que incluye la raíz folclórica, la balada y el tango.

Fue invitada en muchas ocasiones a ser solista de la Orquesta Nacional de Música Argentina «Juan de Dios Filiberto», así como de la Orquesta del Tango de la Ciudad de Buenos Aires, con la que grabó un tema en vivo en el 1º Festival SADAIC.

Su presencia era constante, tanto en los escenarios porteños, como en los innumerables festivales que se realizan en todo el país. Allí no solo deleitaba con su clara y hermosa voz y con su repertorio ecléctico, sino que solía realizar talleres de apertura musical con el cual acercaba al público su conocimiento y experiencia, el trabajo del músico y propuestas para buscar nuevos arreglos, sonidos y herramientas. Su última presentación fue en la edición 2016 del Festival de Baradero (provincia de Buenos Aires).

Para Viviana Vigil: «El tango es una pasión irrenunciable. Al folklore, a algunas milongas sureras, siempre se vuelve, pero el tango lo es todo».