Alberto Vila

Nombre real: Vila, Alberto
Cantor y actor
(25 septiembre 1903 - 23 febrero 1981)
Lugar de nacimiento:
Montevideo Uruguay
Por
Horacio Loriente

ersonalísimo cantor, nacido en Montevideo el 25 de setiembre de 1903. Su carrera comienza luego de un ensayo privado para la plana mayor de los Atenienses, una noche de agosto de 1927, acontecimiento que recordara siempre la memoria privilegiada de Víctor Soliño, entonando en la ocasión las estrofas del popular tango “Siga el corso”.

Debutó en la Troupe Ateniense en el Teatro Solís, de Montevideo, el 6 de octubre de 1927, haciendo imitaciones de Carlos Gardel, prolongando sus actuaciones cuando el celebrado conjunto pasó a actuar en el Teatro Coliseo, de Buenos Aires, y la empresa Victor le ofrece un contrato para grabar discos que comienza a cumplir el 12 de diciembre de 1927, registrando cuatro temas, que formarán parte de sus dos primeros discos, tres de ellos tangos uruguayos y un vals de Antonio Sureda y Homero Manzi, “Ensueño”. Corresponde recordar los tangos “Perdonala”, de Juan Agnese, Víctor Soliño y Roberto Fontaina, “Niño bien”, de Juan Antonio Collazo, Víctor Soliño y Roberto Fontaina y “Che papusa oí”, de Gerardo Matos Rodríguez y versos de Enrique Cadícamo.

Alberto Vila seguía en Montevideo, desempeñando tareas como funcionario del Banco de Cobranzas y viajaba frecuentemente a Buenos Aires a cumplir sus compromisos de grabación. El 12 de abril de 1928 interviene como solista en versiones para discos de la Troupe Ateniense en tres espléndidas canciones: “Golondrinas [b]” (zamba), “En un pueblito español” (vals) y “Príncipe azul” (foxtrot).

Prácticamente decidido, en 1929, para realizar una gira por Europa, en el mes de julio del citado año recibe un telegrama de Radio Prieto de Buenos Aires ofreciéndole un contrato de actuación por tres meses, que acepta y cumple. Su presencia en Buenos Aires despierta el interés de los empresarios de los teatros Empire y Florida, con espléndida retribución, lo que lo induce a renunciar definitivamente a su empleo para dedicarse de lleno a sus actividades artísticas.

Realiza giras por toda la Argentina, matizadas por frecuentes presencias en Montevideo. En enero de 1933 actúa ante los micrófonos de Radio El Espectador y Sport, respaldado en la ocasión por un trío de guitarras formado por Baudino, Pardo y Pérez.

Promediando la década del 30, se destaca ampliamente como actor en el cine argentino, donde también se luce como cantor. Radio Bar (1936) lo incluye en un reparto junto a Lidia y Violeta Desmond, Alicia Barrié, Gloria Guzmán y Juan Carlos Thorry y la orquesta de Elvino Vardaro. A esa película le siguen Cuatro corazones (1939), Retazo (1939), La casa del recuerdo y Confesión (1940), viajando a Estados Unidos para intervenir en el filme Se conocieron en la Argentina, con la actriz Maureen O'Hara, donde acompañado por la orquesta de Lud Gluskin canta en inglés y en español. Transcurría el año 1941.

Al retornar a Buenos Aires se destaca en el cine nuevamente. En 1942 en Mañana me suicido y Amor último modelo. Finalmente, en 1946 aparece en Camino del infierno y Adiós pampa mía.

Cabe consignar que Alberto Vila también hizo cine en Montevideo. El 17 de agosto de 1938 se estrenaba en el desaparecido Ambassador en la calle Julio Herrera y Obes entre 18 de Julio y San José, Soltero soy feliz, donde el celebrado artista se lucía junto a Ramón Collazo, cabeza del elenco.

Años más tarde (1946), en una producción rioplatense actuó en Los tres mosqueteros, cuyas escenas principales fueron registradas en las escalinatas de nuestro hermoso Parque Capurro.

Realizó inolvidables temporadas en las principales emisoras radiales de Buenos Aires. Su naturalidad y su auténtica simpatía a las que agregaba su canto tan personal le permitieron ser un auténtico triunfador.

En la plenitud de sus espléndidas condiciones artísticas, cuando aún lucía su auténtica juventud, Alberto Vila puso broche final a su carrera de actor y de cantor. Radicado en Buenos Aires, emprendió algunos negocios, alejado por completo de todos los lugares de sus triunfos.

Encontrándose en Montevideo, rodeado de sus familiares, un síncope cardíaco lo abatió, sorpresivamente, el 23 de febrero de 1981.

Originalmente publicado en el libro Ochenta notas de Tango. Perfiles Biográficos, Ediciones de La Plaza, Montevideo 1998. Auspiciado por la Academia de Tango del Uruguay.