Venganza [c]

Tango

Música: Ramón Collazo

Por castigar la audacia del reo aquel
que quería robarme tu corazón,
una noche terrible yo lo esperé
escondido en las sombras del callejón;
cuando estuvo a mi lado me le acerqué
y quise reprocharle su mala acción,
contestó sonriendo yo no sé qué
y le crucé la “jeta” con mi facón.

Hoy en la cana encerrado
lloro de rabia y dolor
al ver que te has olvidado
de que vos fuiste mi perdición.
Ya sé que te andás floreando
por las milongas con él,
mas no importa, ya lo irás pagando
que todo se paga, ya lo vas a ver.

No tenés sentimiento ni corazón,
para vos es lo mismo cualquier bacán.
En tu alma, milonga, no hay emoción
y tus penas se ahogan con un gotán.
Por hacerme, a tus ojos, digno de vos,
me jugué la parada, no me eché atrás,
tenés alma de fiera, tan perra sos
que me ves encanado y así pagás.

Pero no importa, estas rejas
algún día se abrirán,
y se acabarán mis quejas
y tus aparadas se acabarán.
Escuchá lo que te digo
si es que ya no lo sabés:
Yo te juro que en cuanto me larguen
te corto la cara, pa´ que te acordés.