Y a pesar de todo

Tango

Música: José Libertella
Letra: Reinaldo Yiso

Por mí bebiste un día la copa del martirio
y transformé en infierno tu vida que era un sol,
si habrás llorado tanto, febril en tu delirio,
por esa angustia enorme que di a tu corazón...
Y todavía vuelves, me besas y perdonas,
sin recordarme nada, lo malo que yo fui.
Y aún quieres salvarme, estás aquí a mi lado,
y estás sufriendo mucho porque me ves así...

Como un puñal debiera herirme
tu voz, clavarse aquí en mi pecho,
gritarme el daño que te di
cruel y brutal sin merecerlo...
Hoy, que me voy ya para siempre,
tengo tus manos en las mías;
nada me importa de la muerte
si mi gloria fue tenerte
con tu perdón en mi adiós...

Rompí todos tus sueños y destrocé tu vida
y te cubrí con sombras eternas de dolor,
hice pedazos todas tus ansias más queridas
y te llené de heridas en nombre del amor...
Y todavía vuelves, me besas, me acaricias,
en esta hora amarga que me siento morir,
aún quieres salvarme, estás aquí a mi lado
y estás llorando mucho porque me ves partir.