Milonga para mi viola

Mi viola vuelvo a pulsar
después de un silencio ingrato,
que se estiró por un rato
muy difícil de aguantar.
Hoy al hacerla vibrar,
con todo mi sentimiento
saco del cuore un aliento
más dulce pa’ una canción
que refleje mi emoción
en tan ansiado momento.

Me la habían afanao
tres malandras sin respeto,
junto con otros efectos,
modestos, pero apreciaos.
Nada hubiera lamentao
de toda esa pasta frola,
pero anduve a la bartola
y hasta sin ganas ‘e comer,
pensando qué voy a hacer
privao de mi vieja viola.

Yo no quise denunciar
el choreo a la milicia,
sabía que otra justicia
las cosas iba a arreglar.
Y ocurrió que en un lugar,
vecino a Villa Charola,
se armó la gran batahola
por un malandra cantor,
que se hacía el ruiseñor
justamente con mi viola.

Al actuar la autoridad
del taquerío cercano,
se puso en claro el afano
que me dolió de verdad.
Mi viola tenía ya,
y al besarla con amor,
solicté p’al autor
del robo no hagan sumario
perdónelo comisario,
es chorro, pero es cantor.