No me beses mujer

No me besés mujer,
porque veo que tus labios palidecen al besar,
no me besés mujer,
porque sé que cuando besas, no tardás en engañar;
no me besés mujer,
porque el rojo de tu boca
me recuerda la traición;
¡pues tras el color ficticio
va la palidez del vicio
que hacia el fango te llevo!

No dejés en mi cara
señal del artificio
que llevás en los labios
hastiados de besar;
porque las huellas rojas
que en mí tus labios dejan
parece que reflejan
toda tu falsedad.
Si el falso lápiz “rouge”
tus labios enrojece
y hasta rejuvenece
tu boca su color,
¡no existe un ingrediente
para pintarte el alma
que debe ser tan negra
como tu deshonor!

No me besés mujer,
no ofendás con falsos besos a quien tanto te adoró,
no me besés mujer,
si bien sé que sos un Judas
que besás como él besó;
no me besés mujer,
ni pidás que te perdone
pues no merecés perdón,
podés ir a revolcarte
en el fango en que enterraste
mi cariño y mi ilusión.

Tango
Canta Carlos Viván / Orquesta Pedro Maffia
1929 Buenos Aires Brunswick 1411-B