By
Orlando del Greco
[Spanish]

omo su padre le prohibía andar en los cafés con su guitarra, que él precisamente le enseñó, se fue de la casa paterna y apareció en Mercedes (provincia de Buenos Aires) tocando y cantando en lugares similares, hasta que la policía lo restituyó al hogar. Ante esa aventura el progenitor consintió que se ganara la vida de esa manera.

Poco le costó formar dueto, pues era bien conocido en las peñas criollas, y por 1915-16 debutó en la Sociedad Italiana, de la calle Paraná, con el recordado Juan Raggi. Después del Sola-Raggi, integró los dúos: Salinas-Sola (con Saúl Salinas), De Nava-Sola (con Arturo De Nava), Sola-Díaz (con Fernando Díaz), los Hermanos Sola (con su hermano Domingo), Sola-Guimont, Sola-Pardo, Sola-Pelayo, etc.

En 1922, ingresó a la compañía de Pepe Podestá para hacer Juan Moreira en el Hipodrome de Corrientes y Pellegrini. Con el mismo Podestá fue a Montevideo en 1925 para actuar en el Teatro Solís y al regreso en Rosario con circo y teatro.

También trabajó con Jerónimo Podestá en el Apolo, con Pascual Carcavallo en el Nacional, con Alberto Vaccarezza, Claudio Martínez Payva y otras primerísimas compañías en distintos teatros como Opera, Boedo, Politeama, giras al interior, una con Horacio Pettorossi y otros conocidos artistas.

Al igual que los teatros, varios cabarets lo vieron desfilar con dúos o conjuntos que él mismo dirigía y que integraron, entre muchos otros, su esposa Amalia Gonetti, los después famosos Ramón Espeche, el tucumano Villa (llamado el Tucu-Tucu), el Orientalito, López Figueroa, Víctor Ledesma, Julio Aparicio. Uno de esos conjuntos se llamó Los Norteños, formado en 1926, y algunos de los cabarets fueron: Maipú Pigall, Folies Bergere, Tabarís, Cosmopolita.

El comienzo de la radiofonía lo halló en Radio Cultura, actuando más tarde por las emisoras Prieto, Argentina, El Mundo, Belgrano y otras, haciendo solos de guitarras, cantando o secundando a Rosita Quiroga, Patrocinio Díaz, Mercedes Simone, Libertad Lamarque, Néstor Feria y varios más; a algunos de ellos los acompañó en teatros. Integró el trío Sola, Cabarcos y Cisneros para acompañar a Domingo Conte, y en grabaciones hizo algunas con Ignacio Corsini y Néstor Feria. Antes dejó su voz en unos pocos discos.

Mucho antes había compuesto varias canciones que cantó pero no editó y así, por esa negligencia, se perdieron, pero otras tuvieron algún éxito como “Pobre muñequita (Muñequita de trapo)”, tango que hizo con Atilio Supparo, Víctor Troysi y Emilio Iribarne, que al ser cantado por Iris Marga en la revista de Cayol Las alegres chicas del Maipo en 1925, grabara luego Carlos Gardel; “Espiantá Gregorio” que grabó la Simone; “La chancha overa”, ranchera grabada por la Lamarque; “Reliquia gaucha”, que con versos de Juan Fulginiti creó Agustín Magaldi; “Un paso más adelante”, milonga creada por Domingo Conte; “Del tiempo pasado”, “Fin de cuentas”, “Del lao de abajo”, “Ojos matreros”, “Para mi viejita”, tangos; “Fragmentos de rosas”, “Oh madre”, valses; “La muerte del pibe”, canción hecha sobre versos de Felipe Fernández (Yacaré) y que erróneamente se hace figurar como de Evaristo Carriego.

A Gardel lo conoció cuando pibe, pues solía asomarse a los cafés del Abasto (ese era también su barrio), para escucharlo cantar, hallándolos muchas veces el ambiente en el mismo quehacer a través del tiempo.

Con suma nostalgia recordaba un hecho que pudo vincularlo al cantor estrechamente: «Por 1929 estaba yo actuando con bastante éxito en el Politeama Argentino cuando vino a hablarme Carlitos: —«Che, Sola... ¿Por qué no te venís conmigo...? Vos sabrás que el Negro (Ricardo) me abandonó después de tantos años». —«Pero, cómo no Carlos... De mil amores», le contesté y quedé comprometido a irme con él. Pero mi familia se opuso grandemente argumentando que Gardel viajaba seguido al extranjero y que aquí no me faltaba trabajo, por lo que tuve que desistir y recomendé a Carlos que viera a Riverol. Así fue que éste pasó a integrar su conjunto, salvándome al cabo de los años de lo que pasó en Medellín».

Emilio Sola nació en Buenos Aires el 3 de enero de 1897 y allí falleció el 28 de agosto de 1952.