A pesar de todo

Tango 1935

Tangotexte: Carlos Pesce

Las últimas hojas que caen del invierno
el fin de mis días parece anunciar,
si vieras, viejita, qué noche más larga...
no pude, un momento, los ojos cerrar.
Estoy desahuciado, no tengo esperanza,
la fiebre maldita machaca mi ser;
y un frío terrible penetra en mis huesos,
y estoy sin aliento de tanto toser.

¡Por lo que más quieras,
decile a la ingrata!,
que no se avergüence,
que me venga a ver;
¡que a pesar de todo...
la sigo queriendo
con las mismas ansias
que la quise ayer.

Por ella que ha sido la luz de mi vida
en horas felices de nuestra pasión,
por ella me muero llevando en el alma
tan sólo el recuerdo de aquella traición.
Qué frío que siento, qué fiebre que tengo,
qué gusto la Virgen de hacerme sufrir,
¡qué obscuro se ha puesto, parece de noche...
tápame viejita que quiero dormir!