Cafecito del recuerdo

Poema lunfardo

Tangotexte: Martina Iñíguez

Un pocillito de café me trae
de nuevo tu recuerdo...
Es el mismo pocillo en que escabiabas
después de cada almuerzo,
en lunga sobremesa compartida,
café, chamuyo y sueños.
Las paredes del bulo eran entonces
verde paisaje al horizonte abierto
y nos llovía sol en la sabiola
gota a gota del techo.
Tu voz, con berretines de verano,
yirando camelero
deschavaba entre líneas,
de postre, algún...¡te quiero!
¡Tantas veces
trayendo batimentos
de selva y cafetales
supo a café tu beso..!
De noche en la catrera
gambeteando al silencio
estiraba la mano y te encontraba
a mi izquierda durmiendo
y hasta al aire le daba
debute aroma de café tu aliento.

Era una mishia sombra la pelada
en aquellos momentos
pero llegó un mal día hasta tu almohada
sin hacer espamento.
...Y empilchó las paredes de hojas secas
de un tinte amarillento
...Y fui como una pieza dislocada
de un cachuzo esqueleto
que en noches sin azúcar y sin luna
junó al mundo perplejo.
Ya no endulza tu amor la sobremesa
y el café es más oscuro y más espeso.
Acarician mis manos el pocillo
que entibia el cafecito del recuerdo,
te respiro en el aire entreverado de cosecha y cafeto
y en mi boca que aún busca tu boca
el café...sabe a beso.