Por
Abel Palermo

uvo el privilegio de haber grabado con Aníbal Troilo, Osvaldo Pugliese, Astor Piazzolla y Mariano Mores. Es sin duda, una de las últimas estrellas de la canción ciudadana, con buena técnica, una voz de gran musicalidad y un registro de soprano que supo utilizar adecuadamente en su época con Pichuco.

Nació en la ciudad de Morón, provincia de Buenos Aires, muy cerca de la Capital Federal. A los pocos años, sus padres se radicaron definitivamente en el barrio de Liniers. Su papá se llamaba José Vázquez e Isabel Rodríguez, su mamá, completaba la familia, su hermano mellizo Oscar Nelson.

Don José era un amante del tango y, de chiquita, la llevó a estudiar canto con el maestro Eduardo Bonessi, con quien estuvo durante 11 años. Luego siguió con la ex soprano del Teatro Colón, Marta Constante, con la que desarrolló su extensión vocal hasta lograr la potencia de una cantante lírica e integrar los coros de dicho teatro.

En 1957, se presentó en un concurso de voces nuevas, organizado por Radio Splendid y la revista Radio Film, dirigida por el cantor y luego periodista Emilio Roca, que también era dueño de la exitosa revista Cantando. Salió segunda, perdiendo por un punto en la final con la cantante rosarina Carmen Martínez. Como premio firmó un contrato por un año en la radio, que fue renovado a su término. Después, debuta en la televisión por el canal 7, acompañada por un trío musical de notables intérpretes: en el piano Osvaldo Manzi, en bandoneón Eduardo Rovira y en contrabajo Enrique Kicho Díaz.

El ciclo televisivo es interrumpido en 1960, al ser requerida por Astor Piazzolla, recién vuelto de Estados Unidos, para cantar en su quinteto, junto con el trío de músicos mencionado. Inmediatamente graban un disco larga duración para la RCA-Victor: Piazzolla. Bailable y apiazolado, en el que Nelly registra cuatro temas: “María”, “Bandoneón arrabalero”, “La casita de mis viejos” y “Cristal”.

Al año siguiente, Mariano Mores la llamó para grabar con su Orquesta Lírica del Tango su tema “Viejo Madrid”, en el sello Odeon. Pero su consagración definitiva se produjo el 1° de octubre de 1963, cuando graba “Madreselva”, ya como integrante de la orquesta de Aníbal Troilo. Durante los tres años que estuvo con Pichuco, tuvo de compañeros a Roberto Rufino, Roberto Goyeneche y Tito Reyes.

Grabó con Troilo 16 temas, destacándose las versiones de “Canción de Ave María”, de Cátulo Castillo y Héctor Stamponi; “Barrio de tango”, de Troilo y Manzi; “Galleguita”, de Horacio Pettorossi y Alfredo Navarrine y “Golondrinas” de Gardel y Le Pera. El último registro fue el 13 de abril de 1966, “Yo no merezco este castigo”, de Roberto Cassinelli y Marcelino Hernández.

A partir de 1968, ya como solista, realizó importantes giras en el país y en el exterior. Luego, actuó con gran éxito en Buenos Aires, en el Estaño de Pepe Basso.

En 1969 y 1972, graba dos LP para el sello Microfón, con arreglos y dirección de Osvaldo Requena.

En el verano de 1973, cantó en el Hotel Rivera de Mar del Plata —compartiendo el espectáculo con Troilo, Pugliese y Goyeneche— y en el resto del año, en el escenario de Malena al Sur. Luego, actuó con la orquesta de Francisco Rotundo, en su local tanguero del barrio de Villa Luro, junto a Floreal Ruiz y Alfredo del Río.

Nuevamente en la televisión, participó, con otros grandes intérpretes en Grandes valores del tango.

En 1975, actuó en el Teatro Colón en el homenaje a Carlos Gardel, a 40 años de su desaparición, siendo la única voz femenina que participó en esa ocasión y fue acompañada por una orquesta que dirigió Héctor Artola.

A partir de 1977 participó con la orquesta de Osvaldo Pugliese en diferentes locales, teatros, en televisión y fue invitada por el maestro para la grabación de un tango, en 1979, para el sello Odeon: “Mentira”, de Francisco Pracánico y Celedonio Flores.

Al mismo tiempo, continúa actuando en la televisión y hace presentaciones junto al cantor Horacio Deval.

En 1983 graba un larga duración, para el sello RCA-Victor, titulado Todo Buenos Aires, con la dirección orquestal de Raúl Garello. Luego emprendió una importante gira por toda América, acompañada por la orquesta de Antonio Garcés.

En 1985 participó, junto a Carlos Acuña, Hugo Marcel, Antonio Tormo y el recitador Héctor Gagliardi, en la grabación de una opera tango que recuerda la vida de Eva Perón, titulada Volveré y seré millones, sobre textos de Miguel Ángel Jubany y música de Roberto Pansera y Domingo Federico. En esta obra Nelly interpreta la figura de Evita.

Después emprendió una nueva una gira, actuando en Colombia, Venezuela, terminando en Miami (EEUU), junto a Horacio Deval, ya radicado definitivamente en los Estados Unidos.

En 1988 se concretó un viejo anhelo de Nelly, viajar a Japón, en compañía de importantes figuras del tango: Roberto Goyeneche, el pianista Orlando Trípodi, los bandoneonistas Néstor Marconi y Daniel Binelli, el violinista Reynaldo Nichele, entre otros. El espectáculo fue presentado en las más importantes ciudades de Japón.

En la actualidad sigue trabajando, brindándonos su simpatía, su manejo del escenario y, pese que su voz ya no tiene el brillo de antaño, su personalidad impera sobre cualquier otra circunstancia.