Genaro Espósito

Nombre real: Espósito, Genaro Ricardo
Seudónimo/s: El Tano Genaro
Bandoneonista, guitarrista, pianista, compositor y director
(17 febrero 1886 - 24 enero 1944)
Lugar de nacimiento:
Buenos Aires Argentina
Por
Jorge Palacio (Faruk)

ste destacado músico, pionero entre los que formaron las primeras orquestas típicas, nació en el barrio de San Telmo de la ciudad de Buenos Aires. Lo mismo que sus colegas del fueye, aprendió a tocarlo de oído con el maestro Antonio Solari, uno de los primitivos «descubridores» del instrumento y pionero en su enseñanza. También de oído fue que aprendió el piano y la guitarra. Recién cuando viajó a Europa, en 1920, adquirió conocimientos musicales académicos.

El Tano Genaro, cuando aún no tenía sólidos conocimientos musicales, fue maestro de dos grandes bandoneonistas: Anselmo Aieta y Ricardo Brignolo.

«El Tano Genaro representa el despertar de la zurda de los fueyeros guardaviejistas, junto a El Alemán Bernstein, que tenía un notable dominio de ambas manos», nos dice Oscar Zucchi en su libro El Tango. El Bandoneón y sus Intérpretes.

Su primer conjunto, con el violín de Federico Lafemina y la guitarra de Torres, data de 1908, y lo formó para tocar en reuniones barriales.

Dos años más tarde, debutó en el Café La Marina, de Suárez y Necochea em el pintoresco barrio de la Boca, integrando un trío con el violín de Agustín Bardi —El Chino—, y la guitarra de José Camarano —El Tuerto—.

En 1911, pasó a un café de San Telmo, reemplazando a Bardi por Enrique Muñecas. Con los mismos músicos actuó en La Buseca de Avellaneda (suburbio de Buenos Aires), para volver a La Marina en 1912, esta vez con Alcides Palavecino en violín y Harold Philips en piano.

Ese mismo año fue contratado por el sello Victor para grabar con un conjunto integrado por bandoneón, violín, guitarra y clarinete, bajo el rubro Orquesta Típica Gennaro Espósito, no se conocen el nombre de los integrantes.

Su primera grabación fue el tango “Ya vengo”, de Julián Robledo. En el acople del disco, nº 63712, está el vals “Las violetas”, primer registro también, de Ignacio Corsini.

Continuó su labor discográfica en los sellos Columbia Record, ERA y Atlanta. En Columbia con la participación de Tito Rcatagliatta en violín y Roberto Firpo en piano; en ERA grabó con Julio Doutry (violín), José Fuster (flauta) y José Camarano (guitarra); y en Atlanta con Pedro Vicente Festa (violín), Echeverri (flauta) y otra vez Camarano.

Cambiando siempre de ejecutantes, se presentó en el Palais de Glace con Vicente Pepe en violín, Vicente Pecci en flauta y Guillermo Saborido en guitarra. Luego, para actuar en cafés de la Boca, convocó a Ernesto Zambonini (violín) y a Juan Carlos Cobián (piano).

Después de realizar una exitosa gira por las provincias de Córdoba y Tucumán, volvió en 1918 a Buenos Aires para actuar en el Teatro Roma, con su hermano Carlitos corno segundo bandoneón, Alcides Palavecino en violín y Vicente Gorrese —Kalisay—, en piano. Con ellos y con otros elementos registró para el sello Telephone sus últimas seis grabaciones en la Argentina.

En 1919, pasó a integrar la orquesta de Eduardo Arolas en la ciudad de Montevideo y fue figura de atracción en el café Zunino de esa ciudad. Estas fueron sus últimas actuaciones en Sudamérica.

El año clave en la carrera de El Tano Genaro fue 1920, porque partió rumbo a Marsella, en un barco de carga, junto al bandoneonista Manuel Pizarro y al violinista francés Víctor Jachia. El Tano y Pizarro tocaron puerto francés el 6 de agosto de ese año, pero solos, ya que Jachia murió en la travesía.

Tras una corta actuación en Marsella, viajaron a París, en 1921, donde la orquesta Genaro-Pizarro fue contratada para actuar en los dancings Fontaine y Pavillon Dauphine y estaba integrada por los músicos Güerino Filipotto y Celestino Ferrer, los demás eran franceses. El conjunto se disolvió cuando Pizarro regresó por una temporada a Buenos Aires en 1922.

Genaro Espósito siguió actuando en Europa con mucho éxito hasta el estallido de la Segunda Guerra Mundial en 1939, con su Orchestre Argentine Genaro Espósito, presentándose en locales de fama internacional como El Garrón, Le Parroquete y en el foyer del Casino de París.

También en grabó discos en Francia, para los sellos Columbia (entre 1924 y 1927), Fotosonor (1931), Decca (1935), M.A.X.S.A. y Gramophone (1931).

Su obra autoral es extensa. Entre sus tangos más representativos se encuentran: “La percanta”, “Receta médica”, “Bijou”, “La montura”, “Eulogia (Los de la banda)”, “Manuel Lema”, “Juan José”, “Mon petit Claude”, “El crack Larrea”, “Pare la música”, “El goruta”, “Don Machado”, “La Cubanita”, “El manantial”, “Conflicto”, “La pelada” y “Mi negra”. Los valses: “Pienso en ti sin cesar”, “Amor desesperado”, “La flor del pago”, entre otros y la polca “La cantinera”.

Falleció en París, en pleno conflicto bélico. «Fue, sin duda alguna», nos dice Zucchi, «uno de los más grandes propulsores del tango en Europa... a quien se debe, en buena medida, el auge que nuestro tango alcanzara en el viejo continente».