El Flaco Dany

Nombre real: García, Daniel
Bailarín y profesor
(8 mayo 1936 - 10 diciembre 2019)
Lugar de nacimiento:
Buenos Aires Argentina
Por
Ricardo García Blaya
El rey del traspié

o conocí en ocasión del estreno del documental Leyendas del tango danza, en el Marabú, hace poco tiempo atrás, y me llamó la atención su pinta, la simpatía de sus gestos y el carisma, lo que en el barrio llamaríamos un tipo canchero.

Es uno de los bailarines protagonistas de ese film en homenaje a los grandes milongueros, producido por The Argentine Tango Society y realizado por Daniel Tonelli y Marcelo Turrisi.

Su nombre real es Daniel García, pero todos lo conocemos como El Flaco Dany, un ícono de la milonga con traspié en todo el mundo. Prototipo del porteño, nació en el barrio de La Paternal; hoy reparte su vida entre Europa y la Argentina, más precisamente entre Bucarest y Buenos Aires.



Delgado, en jeans y bien bronceado, se destacan sus ojazos celestes y su sonrisa llena de picardía. Cuando está entre nosotros lo podemos encontrar bailando, con su ritmo distinguido y elegante, con alguna joven partenaire en el Sunderland o en Porteño y Bailarín.

En un reportaje que le hiciera Vanesa Úbeda, el Flaco comenta sus comienzos con el tango.

«El tango llegó cuando era muy chico. Yo me iba con mis padres a los salones en donde solían ir a bailar. No eran los salones de ahora, no había mesas adentro, los salones estaban adentro y la confitería afuera. Y así poco a poco empecé a bailar los primeros pasos, siguiendo a mi madre y después mirando a los grandes bailarines de ese entonces, yo tendría 8 o 10 años; ya llegando a los 18 o 19 años, continué aprendiendo mirando a diferentes bailarines.

«Era muy lindo verlos bailar a mis viejos, tenían un estilo salón muy, muy lindo. En esa época, te puedo garantizar que prácticamente no había maestros de tango, entre nosotros nos juntábamos los lunes o miércoles, que los teníamos reservados para bailar y ensayábamos y practicábamos pasos diferentes. Estaba Gavito, Juan Carlos Copes, mucha gente conocida. Estaba también Carlos Pérez. Son infinidad de nombres que te podría dar de los que concurríamos ahí».

Los muchos años como habitué de la milonga, le dieron una gran ventaja en el ámbito de la enseñanza del tango salón. Tiene alumnos y seguidores en todas partes y su estilo se fue depurando, en sus cincuenta años ininterrumpidos con el baile.

Si bien Dany nunca dejó el baile social, fue su amigo, el consagrado Carlos Gavito, quien lo alentó a recorrer el mundo, a realizar giras por diferentes capitales llevando su singular traspié.

Cuando le preguntan cómo surgió la idea de la milonga con traspié, nos responde que fue practicando con un amigo, Omar Vega, quien le mostró un nuevo paso que parecía un tropezón, le fueron dando forma y así empezaron bailando la milonga con traspié.

Entre sus compañeras de baile podemos mencionar a Silvina Vals y Luna Palacios.

El poeta Bebe Ponti, inspirado en su estilo y personalidad, le escribió una milonga en colaboración con el guitarrista y cantor Ariel Prat, que lo pinta de cuerpo entero:

Milonga para El Flaco Dany

Le dicen el Flaco Dany,
traje blanco, rubio fuego
y en sus pies dos llamaradas
de un candombe arrabalero.

Porteño de pura cepa,
bailarín de noche entera.
Son sus pasos resonancias
de una extirpe milonguera.

En un corte sentimiento
y en el otro algún hechizo,
taconeando sobre el piso,
va danzando con el alba.
Y entre cortes y quebradas
una mina lo hace ovillo
y el piolín de su cariño
le remonta en vuelo el alma.

No tiene tiempo, ni tiene,
otro oficio que no fuera.
La milonga campo afuera
y el candombe tango negro.

Que los baila de taquito
donde raye la milonga
con traspiés de compadrito
y al compás de una bordona.


Bienvenido Flaco, es un orgullo y un gran gusto poder compartir tu semblanza con los amigos que visitan Todo Tango.