Edelmiro D'Amario

Nombre real: D’Amario, Edelmiro Antonio
Seudónimo/s: Toto
Bandoneonista, arreglador, director y compositor
(29 agosto 1920 - 28 septiembre 2001)
Lugar de nacimiento:
Los Hornos (Buenos Aires) Argentina
Por
Néstor Pinsón

ació en la Provincia de Buenos Aires, en la ciudad de Los Hornos. Desde muy chico comenzó a sacar notas del bandoneón de Víctor, su hermano mayor, quien lo apoyó desde el principio. A tal punto que, además de enseñarle lo incluyó, apenas adolescente, en la línea de bandoneones de su popular orquesta con la que actuaba en los más destacados salones de la ciudad de La Plata. También en Radio Provincia.

Tenía sólo quince años cuando se presentó en la ciudad de Buenos Aires. La oportunidad, como ocurriera con otros muchos músicos tangueros, surgió en las entonces famosas Matinés de Juan Manuel. Además, actuó en el tradicional Café Germinal y en un espacio de Radio Del Pueblo.

Dos años más tarde, estudió armonía y contrapunto, ya era primer bandoneón y arreglador de la orquesta de Juan Caló. Más adelante, formó parte de la primera formación de Alfredo Gobbi, que debutó en la boite Sans Souci. Luego, viajó a Uruguay y Brasil, países en los que residió un tiempo.

A su regreso a la Argentina, el cantor Ángel Vargas le ofreció la dirección de su orquesta. La relación duró desde el 24 de noviembre de 1955 hasta el 30 de agosto de 1957. De acuerdo a las fechas de grabación, fueron dieciocho los temas. Algunas discografías señalan dos más, los inmediatamente posteriores, pero ambos: “Vos hacés lo que querés” y “Miriñaque”, se realizaron con la dirección de Daniel Lomuto, según su propio relato.

Después, integró la fila de bandoneones de la orquesta de Horacio Salgán. Aquel pibe intuitivo ya era definido como músico de gran escuela, que sacaba a su instrumento notable sonoridad y expresivo fraseo.

Entre sus composiciones podemos destacar los tangos “En la milonga”, en colaboración con Ángel Vargas y los instrumentales “Bacará”, “Colorado el 14”, “Calendario del amor”, con su hermano Víctor (Salvador Víctor D'Amario), “Después del gris”, “El remache” y “Como el ave fénix”.

Boris Puga realizó una reseña sobre la actividad del músico en el país oriental, para la Academia del Tango de Uruguay: «Estuvo en Montevideo en 1946, donde forma rubro orquestal con el pianista Hugo Di Carlo; separado de éste integra una serie de orquestas locales entre las que destacamos las de Juan Cao, Juan Esteban Martínez, Roberto Luratti, Emilio Pellejero y Donato Racciatti (en su primer conjunto). Partió en 1950 y regresó ocho años más tarde para tomar la dirección de la orquesta del cantor Antonio Cerviño, a quien le hizo numerosos arreglos musicales.

«En 1959, formó un sexteto con músicos locales para actuar en boites y en Radio Carve, primero (Tangueando en Carve), y en Radio El Espectador después. La parte vocal estaba a cargo de la cancionista Irma Carrasco.

«Sus presentaciones son permanentes y es infaltable en eventos culturales trascendentes como determinados festivales, inauguraciones de salas teatrales, recordados recitales de tango, como los organizados por el Club de la Guardia Nueva. Su intervención también en el festival rioplatense de tango de 1960, su permanente colaboración con la institución Joventango, donde el 8 de septiembre de 1979, intervino con su conjunto y la voz de su esposa, la cancionista Dalma Sosa.

«Con distintas formaciones grabó para los sellos Sondor, Rodnos y Orfeo. En 1990 formó parte de un trío junto a César Zagnoli y el contrabajista Vicente Martínez y registraron una cassette para el nuevo sello Fono Música. Por entonces fue también bandoneón solista en unas presentaciones de la Orquesta Filarmónica de Montevideo.

«El 30 de enero de 1998, acompañó como solista al tenor Plácido Domingo en los tangos “Alma de bohemio” y “El día que me quieras”, cuando se presentó en el estadio Centenario. Su larga estadía en nuestro país le permitió convertirse en el arreglador mas solicitado. Ha sido funcionario de AGADU y en reconocimiento se le dedicó el tango “Don Toto”, música y letra de Elda Urrutia Ibarra».

Falleció en Uruguay, a los 81 años, víctima de un cáncer, preparando partituras para los futuros conciertos de la Filarmónica de Montevideo, en sus veladas de Galas de Tango, empecinado en estar activo hasta el último aliento, conforme surge de alguna de las necrológicas que estuvieron en mis manos.